Al fin. Necesitaba verte. Sí, lo necesitaba y al fin estás aquí.
A mi lado, conmigo, con tiempo.
Hoy no es mi día y creo que no lo será hasta que no te escuche.
Llevo echándote demasiado de menos desde que doblaste la esquina hace ya 3 semanas y media.
Y todos los días te imagino doblar cada esquina por la que paso y vengas corriendo hacia mí.
Y pensando solo una cosa…
El verte mientras te escucho hablar de mí, como cuando lo hiciste ayer por teléfono mientras yo te imaginaba a mi lado.
Vuélvelo a hacer con mis ojos escuchándote y los tuyos mirándome.
Ahora que estás aquí, háblame.