No hace falta que
me digáis eso de que perdéis la cabeza por ella....
Ya sé de sobra que
tiene esa sonrisa y esas maneras, y todo el remolino que forma en cada paso y
cada gesto que da. Pero además la he visto seria, ser ella misma, y en serio
que eso no se puede escribir en un poema ni en un papel.
Por eso, eso que me
cuentas de "mírala como bebe las cervezas y como se revuelve sobre las
baldosas y que fácil parece a veces enamorarse" Todo eso de que "
ella puede llegar a ser ese único motivo de seguir vivo" Todo eso de que
"los besos de ciertas bocas saben mejor" es un cuento que me sé desde
el día que me dio dos besos y me dijo su nombre.
Pero no sabes lo
que es caer desde un precipicio, y que ella aparezca de golpe y de frente para
decirte: "venga, siéntate a mi lado y me lo cuentas".
No sabes lo que es
despertarte y que ella se retuerza y bostece, luego te abrace y después no
sepas como deshacerte del mundo y aislarte con ella.
Así que supondrás
que yo soy el primero que entiende el que pierdas la cabeza por sus piernas, y
el sentido por sus palabras, y los huevos por un mínimo roce de mejilla. Las
incomodidades de orgullo que pueda provocarte son algo con lo que ya cuento.
Quiero decir que a mí
de versos no me tienes que decir nada, que hace tiempo que veo los míos pasar
delante de mis ojos.
Que yo también la
veo.
Que cuando ella
cruza por debajo del cielo solo el tonto mira al cielo. Que sé cómo agacha la
cabeza, levanta la mirada y se muerde el labio superior.
Que conozco su voz
en formato susurro, formato gemido, y formato secreto.
Que me sé sus
cicatrices, sus dedos y donde tocar para que se ría. Que yo también he
memorizado su número de teléfono, pero también el número de sus escalones, y el
número de pestañeos antes de darte un beso y decirte lo siento o la sonrisa de “te
quiero”. Que no solo conozco su última pesadilla, también las mil anteriores.
Y yo sí que no
tengo cojones a decirle que no a nada, porque tengo más deudas con su espalda
de las que nadie tendrá jamás con la luna (y mira que hay tontos enamorados en
este mundo). Que sé la cara que pone cuando se deja ser completamente ella. Pronunciar sus 6 letras y sea por mí por quien
da la vuelta. Que la he visto volar por encima de poetas que valían mucho más
que estos dedos y la he visto formar un charco de arena rompiendo todos los
relojes que la puso el camino, y la he visto hacerle competencia a cualquier
amanecer por la ventana; no me hablen de paisajes si no han visto su cuerpo.
Que te entiendo.
Que yo escribo
sobre lo mismo, sobre la misma.
Que razones tenemos
todos, pero yo muchas más que vosotros.