La gente peca de mala persona y de mal actor. Pocas buenas personas hay. Ni aunque lo intenten lo consiguen, y si lo consiguen no lo parecen. Y cuando lo parecen, no lo son.
Normalmente la gente desconfía de las personas, las personas son egoístas y sólo se preocupan por sí mismas aunque el hacerlo siempre tenga daños colaterales y acaben perjudicándose ellos mismos. Eso es por el miedo, porque son muy sensibles a la condición humana y se ven vulnerables ante cualquier gesto, actitud o propósito. Tienen falta de confianza en sí mismo. Creen que no valen, o que valen menos, cuando en realidad nunca han sabido lo que valen, prefieren infravalorarse, es lo seguro para ellos, pero no para cualquier reto.
La soledad no es miedo, es calma, es conocerse a sí mismo. Donde hay un círculo negro, hay gente que ve un agujero y hay otros que ven una diana.
Piensa qué ves
